
25/07/2025 l Interés General
Un ejemplo notable es el uso de impresoras 3D para crear estructuras de hormigón, una técnica que ya se está implementando en proyectos piloto en Buenos Aires. Esta tecnología permite construir viviendas en tiempo récord, con una precisión y calidad que desafían los métodos tradicionales. Además, la robótica está comenzando a desempeñar un papel crucial en tareas repetitivas y peligrosas, liberando a los trabajadores para que se concentren en labores más complejas y creativas.
Mirando hacia el futuro, se espera que la automatización continúe expandiéndose, impulsada por la creciente demanda de construcciones sostenibles y eficientes. Los expertos proyectan que para 2030, más del 50% de las tareas en un sitio de construcción podrían ser realizadas por máquinas. Esto no solo transformará la manera en que construimos, sino que también redefinirá el papel de los trabajadores en la industria.
En conclusión, la automatización en la construcción no es solo una tendencia pasajera, sino una evolución necesaria para enfrentar los desafíos del siglo XXI. En Argentina, este cambio ya está en marcha, prometiendo un futuro donde la innovación y la sostenibilidad van de la mano.